Al fin he conseguido algo que anhelaba desde hace tiempo: poder comprobar la interfaz de un dispositivo electrónico antes de comprarlo.
Este año, los planes originales de SSMM los Reyes Magos para mis padres, pasaban por regalarles un par de teléfonos móviles. Como asesor tecnológico suyo (en mi familia) me decidí a visitar una tienda de la cadena Miró (Centro comercial Tres Aguas, Alcorcón). En el caso de mis padres, importa más la facilidad de uso que las cámaras, bluetooth y demás. Ellos ni siquiera suelen mandar/leer SMS's.
La dependienta se ofreció a ayudarme en la elección de los terminales, entre los que se encontraban varios de pack prepago. Por el aspecto exterior me interesé en un SonyEricsson J210i, un terminal pequeño y con teclas de fácil manejo. Para mí lo interesante era ver la sencillez de uso del interfaz, por lo que pedí a la dependienta si era tan amable de encenderlo para mí. Lo que normalmente es una utopía en cualquier tienda, solo parecía tener una limitación: que yo tuviera una tarjeta SIM de la misma compañía. Por suerte, puede usar la mía y comprobar que la pantalla tenía un gran contraste y una tipografía clara.
Finalmente no me decidí a llevarlo, ya que el operador obliga a las tiendas a activar sus tarjetas prepago justo después de pagar, por lo que no se permitía la devolución del pack.
Y ya se sabe que los caminos de Sus Majestades de Oriente son insondables....
